Nunca he tenido mala onda con los gay. O las gay. De hecho, me caen bien, tienen una onda especial y debo decir q su honestidad con la vida y todas las cosas me hacen apreciarlos y querer mantenerlos muy cerca para poder pelar el cable con cosas q mucha gente no gay no cacha. No es que yo me sienta gay, pero su onda sentimental me devora los sesos.

Cuando era bien chica y estaba en el colegio de monjas, tenía una compañera "rara". Las otras pendejas le decían cosas pencas, no recuerdo si yo alguna vez participé de sus sesiones burlonas y antipáticas, pero sí recuerdo haber sentido cierta simpatía hacia ese ser -raro- que se paseaba medio invisible o muy visible entre nosotras. Estábamos en el equipo de basquetball y hubo un tiempo en q ella me conversaba y me decia cosas buena onda, pero con el tiempo entendí que en realidad eran como insinuasiones lésbicas. Yo, pava y con la pendejez en su máxima expresión, no cachaba en esa época y capaz q se haya sentido correspondida o algo.

Pero en fin, la cosa es q yo con los gay buena onda for ever, y los quiero, y los considero pro por q además parece q los que conozco son bien inteligentes y su perspectiva para ver las cosas es original y me gusta.

Y en nuestro paisito está de moda ser gay, reconocerlo, gritarlo a los 7 vientos y creo que está bien. Me gusta ver a los gay contando sus cosas, sus historias, me encanta el Jordi Castell, lo encuentro a toda raja, me gustaría conocerlo, conversar con el y ser su amiga, hablar de moda, de cine, de cualquier huevada incluso, es como divertido y sus salidas de madre me parecen muy chistosas. Tiene esa lengua loca sin mala intención, es como pendejo.

La otra vez leí en un diario que Villouta se declaraba gay. Obvio, dije, el gallo es top. Después empecé a leer algunas entrevistas y cosas donde él hablaba y me pareció menos lúcido que de costumbre. Lo veía en su programa, sin embargo, y me seguía pareciendo top, aunq no me calzaba mucho su onda gay, considerando que hace años en su programa matinal de radio lloriqueaba por su novia y en alguna parte había dicho que como ella era fanática de los videos musicales y se queda hasta tarde viéndolos, había gestado el Interruptor con el fin de que lo viera todas las noches. Algo así. En fin, dije, cosas de gays.

Y hoy me encuentro con un josemiguelvillouta blog, lo leo un poco y definitivamente no me gusta. Que onda, dije. Este gallo se chacreó. Su vida gay no me gusta. Pienso en sus cuentos de la Zona de Contacto, en su programa de radio que yo sagradamente escuchaba todas las mañanas hasta q se fue a la rock%pop y días después lo sacaron de una patada en la raja por decirle a la Ministra de Educación que valía el medio hongo que efectiavmente valía -ídolo-. Pienso en todas las veces que dije, me gusta Villouta, es un gallo inteligente, de mi generación, que bacán estar en un carrete con Villouta, trabajar con el, etc.

Que diablos, espero que el blog sea de otro Villouta, o que se haya dado cuenta de lo pelotudo que puede llegar a ser leerlo y deje de escribirlo. Vamos Villouta, tan mino, te ves mejor en la tele, quiero seguir viéndote en el Interruptor, jugando a ser el hijito de alguien, incluso con tus mechas azuladas, pero por favor, no me interesa tu personal trainer.

Otra cosa: Jordi, si tu vida es así, no escribas un blog, no quiero dejar de querer ser tu amiga.